¿Cómo hacer que el dinero sea tu aliado en tu negocio? ¿Cómo hacer que el dinero rinda?
Quiero analizar contigo unos principios que me gustaría que aplicases en tu negocio.
1 – El dinero es energía, haz que se mueva
Invierte dinero en tu negocio: en ti, tu propia formación, en captar más clientes, en crear tu equipo A.
Todo lo que inviertes —y mimas el tiempo suficiente para que funcione— hace que tu negocio, tu activo crezca y se haga más valioso.
No desprecies tu tiempo.
Hacerlo todo tú no tiene sentido.
No es comportarse como el emprendedor de éxito que quieres llegar a ser en el futuro.
Práctica tu nueva identidad desde hoy mismo.
Primero ser un emprendedor de éxito antes de tener un negocio de éxito.
2 – Rechaza todas las gratificaciones inmediatas
Elige siempre la dificultad frente al placer.
El reto frente al descanso.
La superación antes que la satisfacción.
El foco a la distracción.
La mejor forma de dominar tu mercado es trabajar mucho más que tu competencia.
Si además lo haces mejor que ellos, la harás insignificante para siempre.
El éxito de la noche a la mañana no existe.
Siempre viene precedido de 10 años de trabajo profundo que no se ven desde la superficie.
El éxito es un iceberg.
Solo ves el 10% del trabajo realizado.
3 – Beneficios, no ingresos
Los ingresos son una egométrica.
Olvídate de ellos.
Puedes haber estado trabajando toda tu vida a la cabeza de tu negocio y no haber generado nada más que un sueldo humilde y una pensión miserable.
Los negocios deben tener beneficios.
Pagar impuesto de sociedades y generar reservas para imprevistos y construir el futuro.
Así funcionan.
Tu empresa vale 2 a 3 años el Beneficio Antes de Impuesto (BAI) que genera cada año.
Si tu BAI es de 10.000€ tu empresa vale 30.000€
Si tu BAI es de 1 millón de euros, tu empresa vale al menos 3 millones más las reservas.
Si facturas 10 millones anuales, un BAI de 1 millón es un 10% de tus ventas, no es difícil.
Algunos negocios digitales consiguen 1 millón de euros de BAI anual con 3 millones de facturación anuales.
No estás tan lejos de estos números.
Pero obviamente tendrás que tenerlos identificados.
Marcarte un objetivo.
Y mide tus progresos hacia la meta.
Lo que no se mide, no mejora.
4 – Controla los gastos de tu estilo de vida
Esta es la clave.
Si no estás preparado para recibir dinero, cuando llegue, lo vas a quemar a velocidad luz, y te quedarás a los pocos meses con las tierras arrasadas del paso de un tsunami.
Define lo que necesitas para vivir una buena vida con los tuyos.
Seguramente sea alrededor de unos 150.000€/año, para toda tu familia.
Y con la llegada del dinero en tu negocio, no cambies tu estilo de vida.
Sigue viviendo como lo hacías.
Si empiezas a acostumbrar el cuerpo y tu mente a lujos inútiles, te será difícil volver atrás.
Comportarte mejor como un monje que estudia artes marciales.
Humilde.
Magro.
Sencillo.
Frugal.
Aplicado.
En busca del gesto perfecto.
Aquel que te puede costar todo el lapso de una vida.
Encontrarás la felicidad en el propósito y en el ayudar a los demás.
No en el lujo ni el dinero.
Muy pocos ricos lo hacen bien.
Y se multiplican en prensa, casos de empresas en quiebra por el lifestyle sin control de su(s) dueño(s).
We Work, por ejemplo…
5 – Controla tu tesorería todos los días (Cash In – Cash Out)
Una cuenta para tu familia.
Una cuenta para tu negocio.
Una única tarjeta y de débito para cada cuenta.
No tengas más tarjetas.
Las tarjetas de crédito te ciegan durante 30 días. Recházalas.
Nada de créditos para el consumo. Ahorra primero antes de regalarte algo.
Así cuando entras en la cuenta online de tus bancos sabes exactamente lo que pasa.
Mira este dinero todos los días.
Cuestiona cada gasto.
Reta a tus colaboradores a gastar menos.
Ponles condiciones, serán más creativos. Crearán cosas más perennes.
Busca la jirafa que nadie ve, este gasto completamente inútil que destroza tus beneficios.
Crea reservas e inviértelas de forma prudente en el crecimiento de tu negocio.
6 – Construye tu Sagrada Familia
Si quieres actuar de forma estratégica, deberías tener una visión a 25 años vista. Algo imposible de construir hoy.
Y ponerte de camino hacia tu visión, año tras año.
Algunos años, verás grandes progresos.
Otros no tantos.
Son los mejores, porque estarás trabajando las fundaciones de un futuro más prometedor.
Pero tu foco estará puesto en una única cosa.
Construir tu legado.
Tu rastro en esta tierra.
Con esto en mente, tendrás un uso mucho más estratégico de tu tiempo.
Tendrás un referente para saber si hacer o no hacer tal o tal cosa.
Puedes construir grandes cosas si pones 25 años de acciones compuestas dirigidas todas hacia una misma meta: tu Sagrada Familia
Yo quiero liberar a las personas del sistema, elevar su consciencia para que vivan una vida más acorde a sus principios y sueños.
Vivir según sus propias reglas.
Una vida in fine más feliz.
Una vida digna de ser recordada.
Los pormenores irán cambiando.
El porqué, no.
Esta es mi Sagrada Familia.
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